Entrevista a Alberto Campón

Foto Alberto Campón

Entrevista a Alberto Campón

Hoy entrevistamos a nuestro director de contenidos Alberto Campón.

Fundador y presidente de “Daltruim”, productora independiente que ha operado más de 10 años produciendo proyectos audiovisuales y actor formado en ESAD, es uno de los miembros más jóvenes del equipo Med Films aunque no por lo que a su experiencia se refiere.

Siendo de los más jóvenes del equipo y no por ello menos experto… ¿A qué edad empezaste tu andadura en el mundo del cine y la imagen?

Comencé como tal a finales de 2005, y como fecha oficial el 13 de Enero de 2006, que fue la primera publicación de un cortometraje mío en internet. Estamos hablando de 13 años realmente.

¿Cómo comenzó/despertó esta vocación?

La realidad es que desde pequeño estaba fascinado con las artes.
Empecé a dibujar muy temprano, y desde siempre me pirró disfrazarme con cualquier cosa que hubiese por casa, desde disfraces propiamente dichos como simplemente anudarme una manta como capa y pintarme la cara. Después, también bastante pronto, cogí la cámara de video de mi padre y con mis juguetes montaba pequeñas películas (los escenarios eran mis propios dibujos). Poco después con mis amigos montábamos juegos de rol en vivo con palos.

De manera que la vertiente de contar historias, interpretar y desbocar mis inquietudes artísticas siempre estuvo en mí.

Sin embargo, no fue hasta ese finales de 2005 cuando con mis amigos tuvimos la idea peregrina de grabar las historias y sketches que se nos ocurrían para compartirlas con la gente y divertirnos.

Ahí nació mi productora Daltruim. Poco después, desde el Ayuntamiento de mi localidad (el Casar de Cáceres) se pusieron en contacto con nosotros desde el Centro de Ocio y nos propusieron formalizar una asociación juvenil y hasta ponernos en contacto con la asociación de teatro del pueblo (el grupo Perséfone). No tardé en darme cuenta a qué me quería dedicar, sin duda. De esa manera, acabé cursando en la ESAD de Extremadura los 4 años de Interpretación. Son de los años más felices de mi vida, francamente. Si bien quizá exagero, al menos sí que fueron los años que más me han marcado como persona. Admito y afirmo que salí más humano de allí.

¿Qué influencias crees te han marcado más?

Siempre cuento (con bastante acierto, creo yo) que mi familia ya me dio una estructura. Mi padre era muy cinéfilo y le encantaban las aventuras gráficas de ordenador, así como la literatura de ciencia ficción. Por su parte, mi madre era una auténtica devoradora de libros desde siempre. Carlos, mi hermano, jugaba conmigo y creaba historias que seguir a modo de aventuras, y mi tío Paco me llevaba siempre al videoclub y veíamos muchísimas películas. Por otro lado, no fui un niño especialmente sociable, así que me ensimismaba mucho, creando lo que hoy se considera mucho mundo interno digamos. Y, sin duda, películas como “El Quinto Elemento”, “Drácula de Bram Stoker”, el maravilloso e inimitable cine de Scorsese o actores como Jack Nicholson, Jim Carrey, Gary Oldman o Siguorney Weaver.

¿Qué estilo/género de cine te vuelve loco y por qué?

Supongo que de algún modo me siento especialmente vinculado a la ciencia ficción por mi infancia, pero el thriller oscuro e intenso me ha embriagado por completo toda mi vida.
A día de hoy diría que el cine negro por su estética y personajes, el thriller por su atmósfera e historia envolvente, y como espectáculo y entretenimiento el cine de superhéroes actual me tiene fascinado. No cuento el Western porque, a pesar de que me encante, soy muy purista y selectivo con él.

¿Teatro, cine, tv o todas?

Todas, aunque por orden cine, tv y teatro. El teatro me lo ha dado todo, y a día de hoy puedo decir que he estado más tiempo en teatro que en otro sitio. Sin embargo, soy muy monotemático con el medio audiovisual. Puedo pasarme las 24 horas del día hablando de cine, y al menos 14 de televisión. Sin duda me obsesiona. Lo analizo, reviso mis películas favoritas mil veces, busco sus making of, investigo a los actores, y busco puntos comunes para mejorar mi trabajo. Puedo decir sin miedo ninguno que hay películas que me han marcado y cambiado la vida como nada ni nadie lo ha hecho.

¿Prefieres estar delante de las cámaras o detrás?

Mi prioridad siempre será delante. En origen el estar detrás fue meramente un medio para poder estar delante al mismo tiempo. Al principio juré y perjuré que no me gustaba como tal estar detrás, pero le acabé cogiendo el tranquillo. Aunque hay una regla de oro que a día de hoy he respetado, y es la de nunca dirigir/escribir nada en lo que yo no aparezca. Siempre que dirijo o escribo, ya estoy pensando en qué personaje me supone un reto o que simplemente me muero de ganas de encarnar.

Verdaderamente cada día respeto más la labor detrás de las cámaras, y creo que delante de ellas ese trabajo me ha enriquecido, pero ojalá me sobrepasase en el futuro tanto trabajo como actor que me obligase a dejar un poco de lado el mundo detrás de la cámara, aunque nunca dejarlo por supuesto.

¿Nos puedes contar más sobre tu productora Daltruim? ¿Cómo surge el proyecto?

Pues ciertamente, como ya he dicho, surgió de manera muy natural. Mis amigos y yo estuvimos en acuerdo unánime de querer llevar a video nuestras locuras. Con el tiempo se fue consolidando. Dejó de ser un hobby para nuestro tiempo libre y pasó a ser algo más. Personalmente hubo una época que yo solo pensaba en ello. Nuevos proyectos. Hubo una época que estábamos embarcados en más de 2 webseries, rodando uno o dos cortos y pensando en otra tanda. Fue una locura, y recuerdo esos tiempos con una mezcla de añoranza y un poco de cansancio. Cuando se convirtió en algo verdaderamente serio, mucha gente se marchó, otra entró, y sin darnos cuenta ya teníamos dos largometrajes y uno de ellos con un equipo de más de 80 personas y la ayuda de toda una ciudad. Una locura.

¿Qué destacas de esos 10 años en Daltruim?

Siempre diré que mi camino ha estado acompañado de gente. He conocido a varios centenares de personas maravillosas y que me han ayudado tanto a comprender el mundo, como a la profesión, y, más importante, a mí mismo. Me puedo considerar buena persona gracias a toda esa legión de amigos, compañeros y colaboradores tan magníficos. Hemos creado historias, y ¿por qué no? Hijos muy entrañables (de momento no de manera literal, jajaja).

¿Alguna anécdota de las buenas que confesar?

Habría millones, pero me quedo con una que sucedió rodando nuestro primer film. En el primero, llamado “108-3 un final” estábamos rodando como a las 23:00/23:30 en una calle de Cáceres, en Moctezuma. Teníamos un humilde despliegue de focos para iluminar la localización, cables repartidos que se conectaban en una casa de Cultura que nos cedieron y un equipo técnico de 12 personas y 4 actores.

En retrospectiva era algo minúsculo, pero para aquel momento y los medios que teníamos estaba muy bien. Unos niños se nos acercaron al equipo técnico, con su cámara, la pértiga con el micro, etc. Nos miraron y preguntaron “estáis grabando una película”. Nosotros nos miramos y dijimos “Sí”, y ellos, ilusionadísimos, se miraron y llamaron a un par más de sus amigos que, muy tímidos, miraban desde lejos. Al llegar todos, nos preguntaron “¿Aquí en Cáceres?”, nosotros repetimos, muy contrariados “sí”. Cáceres es una ciudad muy alejada del mundo audiovisual, claro está. Y, extrañados, pero emocionados, dijeron “¿Por qué aquí en Cáceres?”. Nosotros, sin saber muy bien qué decirles, les contestamos “Porque somos de aquí”. Se fueron respetuosamente para dejarnos trabajar. Empezando a reír, nos dijimos a nosotros mismos “Se creen que este rodaje es serio”. Para nuestra sorpresa, el resultado fue extremadamente serio (en cuanto a ejecución “técnico-profesional”).

Has ganado varios premios. ¿Qué sentiste al ganar un premio por primera vez? Y ¿cuál de ellos te marcó más? ¿Por qué?

No termino de creérmelos. Sonará mucho a falsa humildad, pero nunca esperé que nuestro trabajo fuese tan bien visto. Indudablemente me encantan los resultados, y sobre todo, los viajes hasta esos resultados, pero que el resto de gente lo vea también… es entrañable. Supongo que el que más emoción me dio fue el primero. El cortometraje se llamaba Ciodor, y fue de los primeros que mostraba orgulloso diciendo “hay mucho trabajo detrás, y creo que merece la pena verlo”. La gente lo apreció y acogió tanto con aplausos como con cierta reticencia.

Era un cortometraje de terror, y mucha, mucha gente nos dijo que después de verlo quedaron estupefactos. Incluso gente que decía haber soñado con la criatura demoníaca del corto (que interpretaba yo con un increíble bodypainting). El premio fue el del público en el Fanter film Festival de Cáceres en 2012. Yo cursaba primero de Interpretación en la ESAD.

¿Cómo estás viviendo tu experiencia en Med Films?

Absolutamente emocionado. Me siento como un niño en la mañana de Navidad. Estar con personas que tienen mis mismas metas, pasión por el cine y la interpretación, gente que quiere contar historias y que marquen de alguna forma la diferencia… El horizonte no parece tener límite, y de aquí solo pueden salir cosas buenas. Estoy impaciente por poder ver una película en alguna gran cadena de salas de cine, o poner la televisión en una cadena nacional y poder decir “eso es nuestro” o “ahí estamos”.

Por último ¿A qué aspiras? ¿Cuáles son tus sueños?

Como dijo el grandísimo actor Charles Delgadillo, lo ideal debería sería que no buscásemos ser el cabeza de cartel, sino poder vivir de nuestra profesión.

Si mañana pudiera decir que soy actor de cine, con todas las letras, me sentiría en una nube

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Publicado por Vanessa Cadenas

Licenciada en comunicación audiovisual por la Universidad Camilo José Cela, realiza también un postgrado de “Especialista en TV” en la misma Universidad. Trabaja varios años en agencias de comunicación en España y Alemania (Berlín) y funda finalmente su propia empresa de marketing online en España. Recientemente pasa a formar parte del equipo Med Films como Directora de Marketing Online.

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3 Comentarios

  1. Javier Espeso 24 Marzo,2018

    Comentario de Coopola...

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